Add parallel Print Page Options

Ni al pobre distinguirás en su causa.

Si encontrares el buey de tu enemigo ó su asno extraviado, vuelve á llevárselo.

Si vieres el asno del que te aborrece caído debajo de su carga, ¿le dejarás entonces desamparado? Sin falta ayudarás con él á levantarlo.

Read full chapter